11 de Octubre del 2010, en una sesión más de aprendizajes e intercambio, DesdeNos se inundó de magnetismo y fluído energético, gracias a la conexión extendida por Carmen Luz, de cada una consigo mismo, entre todas y el universo.
Energía que se instaló y expandió, dinamizando el festejo del cumplemás de Arista, Diana, Roxana y Tania, nombradas una a una en presencia o ausencia con amor, alegría. Iluminando cada sueño y animando cada deseo.
Entre el intercambio y festejo nos asomamos a la niña que cada una llevaba dentro, para explorar modalidades de conexiones e impacto de perdón, acto central de amor a uno/a mismo/a. Condición necesaria para comprender nuestra elección y el modo de amar al otro/a, sea nuestra pareja, amigo/a, hermano/a, semejante. Provocando el intercambio de nuevos intereses, temas, miradas, lecturas personales y colectivas.
Nuestra agenda extendida, no logró distraernos de nuestro rol de ciudadanas, en relación a los resultados, evolución y tiempo que habían seguido a las elecciones municipales del tres de octubre[1] y el tiempo restante para su culminación aun incierto. Situación que nos había arrojado al pozo de la incertidumbre, que adquiría condiciones de agujero negro debido a la falta de sinceramiento de los resultados definitivos. Una secuela de procesamiento electoral que teñía de penumbra, a la primera experiencia peruana de competencia de dos mujeres candidatas por hacerse del poder local.
Dos candidatas que a poco mas del mes[2] previo al cierre de la campaña, concentraron la atención pública y preferencia electoral[3], revirtiendo encuestas donde una de ellas estaba rezagada[4]. Dos candidatas semejantes en el género y disímiles en sus historias, condición, posición, argumentos, opción, agenda, estrategia, medios y fines.
Una de ellas, reeditaba por enésima vez, una práctica política tradicional agresiva[5], demoledora[6], incisiva[7], socavadora[8], infudiosa[9], avasallante[10]. Desplazándose sinuosamente entre lo público[11] y privado[12], hurgando en la propuesta como en la propia intimidad de su contrincante, aun cuando en esa empresa haga tirones y desmerezca su propia propuesta[13].
La otra, ensayaba una nueva práctica política y actitud de serenidad y calma[14], con discurso sencillo[15], abierto[16], afirmativo[17], cálido[18], transparente[19]. Más humano y humanizante en su resistencia[20] a la tentación de responder agresión por agresión[21], o desgastarse en develar la difamación[22] hasta perder la sonrisa por la presión[23]. Eligiendo invertir su atención en consolidar y difundir, una propuesta de plan, inicialmente general e impreciso[24], traducido en referente que invita al aporte[25] e involucramiento de todo un equipo[26].
Un proceso que se dilataba poniendo a prueba la paciencia, confianza y serenidad de candidatas, acompañantes, aliados/as y electores, mas difícil de sostener a medida que transcurren los días.
DesdeNos no podía sustraerse, por cuanto, superando sus retos individuales y colectivos, acordó que una parte disponible de sus integrantes, iniciaría una vigilia simbólica en el frontis del local de Fuerza Social el trece de octubre a las seis de la tarde, con el objetivo visibilizar la vigilancia y atención ciudadana en el proceso inconcluso de las elecciones. Allí evaluaría la necesidad y posibilidad de su reproducción en otros escenarios.
Según lo previsto, DesdeNos, se hizo presente progresivamente en la cuadra diez de Capac Yupanqui, denominación de calle, que por esas coincidencias de aproximación y anudación de hechos, actores, tiempos e íconos, rememoró la imagen simbólica del inca hábil y suficiente de nuestra historia.
Al lugar, llegamos mujeres y hombres, presididas/os por la penumbra de una Lima que atardece, para dar vida al grupo de vigilia. Llamando la atención de quienes se congregaban al interior del local de FS -un lugar al que muchos llegaban presurosos-, y del público que transitaba de tanto en tanto.
DesdeNos fue acogida por una joven integrante de FS, futura regidora de Lima, quien invitó a una de las integrantes ungrese al local para saludar a una representante técnica electoral, invitación que se agradeció y declinó, llenando de contenido al acto ciudadano y no partidario de hacerse presente en el lugar para producir una imagen simbólica de vigilia, vigilancia ciudadana atenta.
Llegamos de Ate, el Cercado, Chorrillos, San Juan de Dios, Los Olivos, San Juan de Lurigancho, Magdalena, Surco. Informadas con claridad o atraído/a por la coincidencia. Poco a poco fue entrelazándose el interés por hacer que se respete nuestra decisión en las urnas. A ello se sumo el intercambio y análisis de la coyuntura, desde la farándula hasta la conducta descontrolada y abusiva de una de las personas que por la investidura y el poder que concentra, debió controlar sus impulsos, algunas ensayaron, analogías con el minero chileno infiel y se animaron a contar un cuento y cantar una parodia. Surgieron muchas iniciativas para el futuro, que será contenido de otra narrativa futura.
Pasada las ocho de la noche, dicidimos publicitar nuestro acto. Ramos de flores en mano nos dispersamos por la Av. Salaverry
Algunos/as sorprendidos/as dudaron o eludieron aceptar una flor, pero la mayoría sonrió, se emocionó y valoró el gesto, agotandose pronto nuestros ramos. Hombres y mujeres de diferentes edades en una mega ciudad que se dispone a descansar de la jornada, se hallaron un trece de octubre con la sonrisa y ternura de una mujer mayor, alguna joven, un hombre y todo un grupo humano ofreciéndole una flor en medio de una noche fría, animando y reduciendo el rigor del tiempo, incrementando la energía para animar el recuerdo y sostener la vigilia, que impida secuestrar al sueño y voluntad del electorado.
Habrá que volver a recargarse de flores, velas y simbologías nuevas, para cargadas de ellas, recordar y recordarnos, que mantenemos una preocupación ocupada por la democracia, una vigilancia atenta, creativa y renovada.
CSH/
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